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El número de motocicletas ha aumentado en la Ciudad de México. El de los choques, también.

La Secretaría de Movilidad de la ciudad ha determinado que la seguridad de las motocicletas es una de sus mayores prioridades, pero mientras la iniciativa da resultados, quienes conducen motocicletas deben hacerlo bajo su propio riesgo.

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Motorcycle Ownership Has Surged in Mexico City. So Have Crashes.

Aline Suárez del Real, GPJ México

Anabel Aguilar (derecha) y Ángel Solis reparan la motocicleta de la que su familia ha dependido por 14 años.

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TECÁMAC, MEXICO — Anabel Aguilar y su esposo, Ángel Solis, han tenido una motoneta los últimos 14 años a causa de la necesidad de un medio de transporte rápido y económico para su familia en crecimiento.

Aguilar dice que su motoneta es más barata que un auto o que pagar taxis y más segura que el transporte público. Además, les ofrece a ella, a su esposo y a sus tres hijos una opción eficiente de transporte.

“Ahorita ya no cabemos, pero sí nos subíamos los cinco en la motoneta”, agrega Solis, quien trabaja haciendo reparaciones.

En la última década, el número de motocicletas ha crecido en la Ciudad de México. Junto con este crecimiento, ha habido un veloz aumento en el número de accidentes que involucran motocicletas, lo que, según el Programa Integral de Seguridad Vial 2020-2024 de la Secretaría de Movilidad de la Ciudad de México, las convierte en una prioridad de seguridad vial. El programa contempla planes para el adecuado mantenimiento de las vialidades con altos índices de incidentes de tránsito en los que participan las motocicletas, además del fortalecimiento de la educación sobre seguridad vial para la población, con énfasis en hacer pruebas más estrictas para quienes van a obtener su licencia de conducción de motocicletas por primera vez y en crear más escuelas de motociclismo. Sin embargo, hasta que se implementen estas medidas, quienes dependen de las motocicletas deben conducir con precaución.

Aguilar, una vendedora que reside en el municipio de Tecámac, en el Estado de México, dice que su familia no puede comprar un auto. Aunque ni ella ni su esposo han tenido un accidente grave de tránsito, han presenciado uno que involucraba a una motocicleta y sienten nervios al conducir por calles concurridas, por lo que prefieren ir por rutas más tranquilas.

“El 10% de los accidentes en general que se atienden en la Cruz Roja Mexicana en Toluca involucra a un conductor de motocicleta y suelen ser accidentes de alto impacto para los involucrados”, explica Mario Vázquez de la Torre, representante de la Cruz Roja Mexicana en Toluca, capital del Estado de México, en referencia a los accidentes que causan hospitalizaciones.

“Ahorita ya no cabemos, pero sí nos subíamos los cinco en la motoneta”.

De la Torre dice que cada vez ve más y más jóvenes motociclistas en accidentes. Según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía, la mayoría de los accidentes de motocicleta y motoneta en la Ciudad de México y en el Estado de México involucra a conductores entre 18 y 35 años.

A pesar de las leyes para impedir que jóvenes de menos de 12 años conduzcan o anden en motocicleta, es común ver familias que viajan con niñas y niños en este medio de transporte.

“Pues es más barato para transportar a la familia”, explica Kevin Guadarrama, quien con frecuencia usa su motocicleta en el trayecto de menos de 10 cuadras desde casa para traer de la escuela a sus hijos de 10 y de 7 años. “El taxi sale caro y nada más vamos a lugares cerca, nunca vamos lejos con la moto”.

Comprar y mantener una motocicleta es más barato que un auto, y si bien el transporte público es una opción económica, a menudo es más lento y una gran parte de la población no lo considera seguro. Según una encuesta hecha por el Instituto Nacional de Estadística, entre el 67% y el 70% de la población se sintió insegura en el transporte público el año pasado. Nancy Mar se ha trasladado en motocicleta durante siete años. También dirige Alerta Biker CDMX, un grupo en redes sociales para motociclistas en el que más de 200 000 participantes comparten información, desde pedir ayuda luego de un accidente hasta informar sobre baches o semáforos descompuestos. Mar comenta que desde que usa su motocicleta nunca ha tenido un accidente, pero que conoce a mucha gente que sí, en especial conductores jóvenes.

“El mayor causante es el exceso de velocidad y la falta de control de la moto”, dice Mar. En sus grupos de Facebook y WhatsApp, ella promueve usar casco, un requisito legal para motociclistas, y equipo de protección, además de conducir responsablemente y no permitir que niñas y niños menores de 12 años se suban a las motocicletas.

Constanza Delón, directora de Seguridad Vial y Seguimiento a la Información de la Secretaría de Movilidad de la Ciudad de México, no pudo especificar la fecha exacta en que entrarán en vigor las medidas del plan de seguridad vial del gobierno de la ciudad.

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Aline Suárez del Real, GPJ México

Más residentes de la Ciudad de México que no tienen posibilidades de comprar un auto y consideran inseguro el transporte público dependen de las motocicletas para trasladarse.

Delón comenta que hay puntos de control policiales en operación, en los que se detiene a motociclistas que no cumplen las reglas de seguridad, como usar casco o no conducir con más de dos personas en el vehículo, y donde se lleva a cabo pruebas de alcoholímetro. La secretaría también ha planificado una campaña de concientización para recordar a las y los automovilistas que en las calles hay otros vehículos de los cuales deben cuidarse.

En áreas de toda la ciudad, como Iztapalapa, Xochimilco y Tláhuac, se están abriendo escuelas gratuitas de motociclismo y algunas ofrecen programas específicamente para las mujeres, de modo que puedan aprender a conducir motocicleta en un espacio seguro, agrega. Delón dice que el departamento aún está evaluando si estas medidas están reduciendo el número de accidentes y comenta que tendrían una mejor noción de esto una vez que se implementen todos los planes, pues reconocen que desde la pandemia el número de motocicletas ha aumentado rápidamente.

Las personas que tienen motocicleta, como Aguilar y Solis, no piensan que su situación de transporte cambie en el futuro cercano.

Ahora que sus hijos son demasiado grandes para andar en el mismo vehículo, tienen dos motocicletas. Para largas distancias, usan el transporte público, algo que consideran más peligroso que sus motocicletas.

“Sí quisiéramos un carro, pero ahorita no se puede, subieron mucho de precio”, dice Solis. “La moto es fácil de mantener y reparar. No me desharía de ella”.

Aline Suárez del Real es una reportera de Global Press Journal que se encuentra en Tecámac, Estado de México.


NOTA SOBRE LA TRADUCCIÓN

Gerardo Velázquez, GPJ, adaptó este artículo de su versión en inglés.